El COVID 19 perpetúa la injusticia social.
Por Rocío Copete y Juanjo Vergara.
Hace justo un mes compartíamos con más de 20 educadores en formación la vida con niños y niñas que acuden a la escuela como la única manera de huir del trabajo infantil en las ladrilleras.
Escuchamos ahora que India ha decretado el confinamiento a más de 1.300.000 personas que viven en este país.
Pero el COVID 19 tampoco es igual para todos....
Dejamos de ir a la escuela y estamos en casa hasta arriba de trabajo (docentes y alumnado) mientras los niños y niñas de las bhattas (chimeneas) cambiarán el escenario por la fábrica de ladrillos, de sol a sol.
Cambiamos la tiza por apps, plataformas y clases online, grupos de whatsapp etc. mientras ellos lo cambian por la arcilla para moldear ladrillos.
Hacemos la compra de forma exagerada mientras los niños/as de las bhattas han perdido su única comida mínimamente completa al día y que hacían en la escuela.
Estamos encerrados en nuestras casas mientras las familias de las ladrilleras viven en espacios similares a una de nuestras camas.
Agradecemos el rato que podemos respirar en la calle para bajar al perro, ir a comprar o a tirar la basura mientras en las ladrilleras solo tienen un techo de cielo gris y contaminado.
Hemos dejado de pasear, de jugar en los parques, de ver a la familia y amigos mientras estos niños/as cambiarán el tiempo de juego en la escuela por darle la vuelta a mil ladrillos al día para que sigan secándose.
Se reduce la actividad económica al máximo en muchas ciudades mientras que las ladrilleras solo se detienen los días de lluvia.
Nos lavamos las manos a cada rato mientras estas familias no disponen de agua entre las 4 paredes de ladrillos en las que viven.
Hemos dejado de besar y abrazar a los que queremos, mantenemos el distanciamiento social mientras las personas que habitan las ladrilleras -que pertenecen a la supuesta y inexistente casta de los dalits- llevan asociado a su nacimiento el hecho de ser “intocables”.
Encontraremos pronto (soñamos que sea cuanto antes) la vacuna para este virus que está retando a la humanidad, mientras que urge desde hace demasiado tiempo una vacuna contra la injusticia social.
Dicen que el COVID 19 nos cambiará como sociedad... no dejemos de cambiar la mirada y de dirigirla, también, hacia otros lados. Ójala sepamos habitar el mundo de otra manera. Ójala estos extraños días cambien lo que verdaderamente tienen que cambiar.
First time reading this, thanks for sharing